Una clínica estética de Elche estafa a más de 350 clientas

La Policía Nacional ha detenido en Elche a cuatro personas —dos hombres y dos mujeres, de entre 39 y 46 años— por una presunta estafa masiva relacionada con la venta de bonos para tratamientos estéticos que nunca llegaron a realizarse. La investigación cifra en 358 los afectados, con un perjuicio económico conjunto de 45.924 euros.

El caso salió a la luz tras la denuncia de tres clientas que habían adquirido bonos de diez sesiones, valorados entre 340 y 350 euros, y que se encontraron la clínica cerrada sin previo aviso. Algunas llegaron a recibir una o varias sesiones, mientras que otras no pudieron iniciar siquiera el tratamiento.

La Unidad de Policía Judicial de la Comisaría de Elche abrió una investigación que permitió descubrir que la clínica había realizado campañas agresivas de venta de bonos durante todo el año, con descuentos del 20% al 30% e incluso del 50% en Navidad y Semana Santa, unos bonos que, además, no tenían fecha de caducidad.

Según los agentes, el primer gestor de la clínica acumuló problemas de liquidez tras estas campañas, lo que derivó en impagos a los empleados. Ante esta situación, decidió vender el negocio a una conocida y su pareja. Ambos adquirieron las participaciones junto a la deuda acumulada por los tratamientos pendientes, una cifra que —según supieron después— era mucho mayor de lo que se les había comunicado.

La nueva dirección ordenó al personal no atender los bonos antiguos y justificar la falta de servicio con excusas, como averías en las máquinas o bajas del personal. Paralelamente, inició otra campaña de venta de bonos de larga duración —esta vez con caducidad y descuentos del 20% al 40%— cobrados en efectivo y sin entregar justificantes. En los pocos casos en los que se generaba factura en el sistema informático, esta era eliminada después.

Los investigadores acreditan que incluso el día del cierre definitivo de la clínica se siguieron vendiendo bonos, pese a que la nueva gerencia ya no tenía intención de prestar los servicios. Al mes siguiente, el anterior administrador recompró el negocio, dejando sin atender tanto los tratamientos pendientes como los nuevos bonos vendidos poco antes del cierre.

De los 358 afectados, solo 31 habían denunciado antes de finalizar la investigación. Con los indicios obtenidos, la Policía detuvo a los tres responsables de la empresa y a una empleada implicada. El caso ha sido remitido a los juzgados de Elche.