Mazón anuncia que la Generalitat defenderá en los tribunales el trasvase Júcar-Vinalopó

El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha reafirmado el compromiso del Consell con la defensa de los recursos hídricos de la Comunitat Valenciana y ha anunciado que el Ejecutivo autonómico se personará en la demanda presentada por Xúquer Viu contra la adenda al convenio que regula el trasvase Júcar-Vinalopó. El objetivo, ha señalado, es garantizar la continuidad de esta transferencia de agua “que necesita y merece nuestra tierra”.

Mazón avanzó esta decisión durante la apertura del VII Congreso Nacional del Agua en Elche, donde defendió que el trasvase Júcar-Vinalopó es “fruto del consenso entre regantes y un ejemplo de solidaridad en el que todos los agentes implicados están cumpliendo con los compromisos adquiridos”. Según subrayó, esta infraestructura se sostiene “en la razón y en criterios técnicos y científicos”, frente a “la política y el dogmatismo” que, a su juicio, está aplicando el Gobierno en materia hídrica.

En este sentido, reprochó al Ejecutivo central que “no haya aportado ni una sola razón técnica para cambiar las normas de explotación” del trasvase Tajo-Segura, advirtiendo que se pretende modificar para “poner fin al trasvase en la provincia de Alicante”. El president incidió en que esas reglas “no guardan relación con los caudales ecológicos del Tajo, que están garantizados y no corren peligro”.

Mazón defendió que “el trasvase Tajo-Segura no es la causa de los problemas del Tajo, ni en calidad ni en cantidad de agua”, y recordó que no se ha registrado “ningún incumplimiento de los caudales ecológicos por falta de agua en la cabecera”. En cambio, sí denunció “desembalses excesivos que desperdician recursos hídricos de gran valor”.

El president criticó también la “falta de voluntad de diálogo” del Gobierno en esta materia e instó a acometer una gestión adecuada de los embalses y la modernización de regadíos, incluyendo la construcción de balsas que optimicen el uso del agua destinada a riego. Consideró que estas actuaciones son “imprescindibles” para mejorar el régimen fluvial, preservar la calidad de las aguas y reducir los desembalses en cabecera sin comprometer las garantías de la cuenca cedente.

Frente común por el Tajo-Segura

Carlos Mazón advirtió de que un posible fin del trasvase Tajo-Segura tendría “un impacto especialmente negativo” en Alicante, Murcia y Almería, y adelantó que la Generalitat promoverá un frente común junto a las comunidades autónomas afectadas, los regantes y los ayuntamientos. Según explicó, la implantación de los nuevos caudales ecológicos y los cambios en las reglas de explotación reducirían notablemente el agua disponible para regadío, lo que supondría “una pérdida patrimonial total de 5.692 millones de euros, afectando a más de 27.000 hectáreas de cultivo y con la destrucción de más de 15.000 empleos”.

En el caso de la provincia de Alicante, los efectos económicos directos se traducirían, según precisó, en una caída de la producción agrícola de casi 61 millones de euros y en la pérdida de unos 1.700 puestos de trabajo.

Modernización y reutilización de recursos

Durante su intervención en el congreso, el president defendió “el diálogo entre territorios porque los desafíos del agua no entienden de fronteras” y destacó el esfuerzo de la Comunitat Valenciana en el uso eficiente de los recursos. En este sentido, puso en valor el avance de los tramos II y III del postrasvase Júcar-Vinalopó y el proyecto ya redactado de desdoblamiento de la conducción principal.

Mazón recordó además que la Generalitat destinará en 2025 un total de 38,8 millones de euros a la modernización de regadíos, de los que cerca de 19 millones corresponden a inversión directa. “Esto nos permitirá seguir siendo la primera región europea en volumen de agua reutilizada”, destacó.

El jefe del Consell concluyó su intervención agradeciendo el esfuerzo de todas las personas que trabajan por garantizar el futuro hídrico de la Comunitat Valenciana y subrayó que el compromiso del Gobierno autonómico se basa en la justicia: “Defenderemos el agua que nos corresponde porque el agua es sinónimo de vida, prosperidad, protección ambiental y esperanza”.