Los productores de trufa podrán acceder a más ayudas tras el cambio normativo

El conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, ha afirmado que el Consell está impulsando decididamente el cultivo de la trufa en la Comunitat Valenciana, “una actividad con gran potencial económico, ecológico y social para las zonas rurales del interior”.

Barrachina ha recordado que desde el pasado 1 de enero, la trufa se considera cultivo agrícola y no forestal, lo que supone un cambio normativo clave para su impulso.

“El suelo destinado al cultivo de trufas mediante técnicas agrícolas ya se considera suelo agrícola temporal cuando se ubica sobre terrenos forestales, y exclusivamente durante el periodo de explotación. Finalizado este periodo, el terreno recupera su condición original de suelo forestal”, ha explicado el conseller.

Barrachina ha realizado estas declaraciones tras mantener un encuentro con alcaldes y alcaldesas de la Mancomunitat Alt Maestrat en Benassal y el vicepresidente de TRUVAL-TRUFCAST, Antonio Torío.

Durante su intervención, el conseller ha hecho hincapié en el “indiscutible valor de la trufa, ya que su producción se realiza con árboles autóctonos de nuestra autonomía”.

Barrachina ha insistido en que esta medida se enmarca en una estrategia más amplia de apoyo al sector agrícola valenciano: “Desde el Consell queremos que la agricultura de la Comunitat Valenciana siga siendo competitiva, además de una seña de identidad que nos diferencia. Por esta razón, debemos trabajar de manera incansable para poner en valor todo lo que produce nuestra tierra”.

La consideración de la trufa como cultivo agrícola abrirá nuevas posibilidades para los productores, facilitará el acceso a ayudas y fomentará la actividad económica en comarcas con alto valor medioambiental y potencial agroforestal.

Reunión con Regantes

Tras mantener un encuentro con representantes de la Asociación de Regantes de l’Algar, el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca ha expresado su apoyo a las iniciativas de modernización y mejora de las explotaciones trufícolas de la zona. “El Consell estudiará fórmulas para acompañar técnicamente y facilitar el acceso a recursos hídricos, en línea con el compromiso del Gobierno valenciano de impulsar el regadío sostenible como motor de desarrollo rural".

Por último, Barrachina ha recordado las ayudas a jóvenes y nuevos agricultores y ha destacado el incremento de la prima básica mínima de 20.000 a 30.000 euros, así como la subida del tope máximo de ayuda de 70.000 a 80.000 euros, lo que permitirá ofrecer un mayor respaldo a quienes deciden iniciar su actividad agraria.

Barrachina ha subrayado que estas ayudas buscan garantizar el relevo generacional y la supervivencia del sector agrario en la provincia y en toda la Comunitat Valenciana. “Este Consell apuesta por la agricultura con hechos concretos y por una política agraria que incentive, no que restrinja. Decimos no al abandono de los campos y sí a la libertad, al emprendimiento y a la esperanza de un futuro mejor en el medio rural”, ha concluido el conseller.