Robaban en casas utilizando dispositivos electrónicos de alta tecnología

La operación se inició en septiembre, cuando los agentes de la Policía Nacional tuvieron conocimiento de una red que al parecer se dedicaba a cometer todo tipo de delitos contra el patrimonio en la provincia de Alicante, en concreto en San Juan, El Campello, Javea, Altea, Calpe y Torrevieja.

Los agentes detuvieron en Santa Pola a siete personas de origen ucraniano y ruso, de entre 23 y 53 años de edad, por su presunta vinculación con robos en el interior de vehículos y domicilios, para los que empleaban dispositivos electrónicos de alta tecnología que no dejaban rastro de fuerza. La Policía practicó tres registros domiciliarios en Santa Pola y Alicante.

En otra operación diferente, a finales de marzo, los agentes localizaron y detuvieron a otros tres hombres, de nacionalidad argelina, que conformaban una organización que cometía los robos principalmente en Alicante y Murcia.

Entre los tres primeros registros, los investigadores hallaron, entre otro material, dos armas de fuego cortas de nueve milímetros con sus respectivos cargadores municionados, siete cajas conteniendo munición de diferentes calibres, dos captadores de frecuencias para grabar los códigos de apertura de los vehículos, 11 llaves de diferentes vehículos de alta gama, once terminales móviles, trece dispositivos electrónicos, y 1.040 euros en efectivo.

A los siete primeros detenidos se les acusa de los delitos de pertenencia a organización criminal, delitos continuados de robo con fuerza, robos de vehículos y tenencia ilícita de armas, y han pasado a disposición judicial, y los otros tres detenidos del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Alicante.

Con la desarticulación de estas dos organizaciones criminales, se han esclarecido hasta el momento 22 hechos delictivos, cometidos en diferentes puntos de la provincia de Alicante, Málaga, Castellón y Murcia.