Un monumento recuerda a las víctimas del accidente del metro de Valencia de 2006

El domingo se inauguró el monumento homenaje a las víctimas del accidente de metro de Valencia del 3 de julio de 2006, coincidiendo con su décimo aniversario. Este espacio, inaugurado junto a la estación de metro de Torrent Avinguda, cuenta con 21 cipreses, uno por cada víctima de Torrent que murió en el accidente de metro, y está presidido por un monumento, símbolo de "de vidas rotas y resistencia", tal como explicó la portavoz de la Asociación de Víctimas del Metro 3 de julio, Rosa Garrote.

El monumento "enriquece el alma de Torrent" y hará posible evocar, cada vez que se visite, que "cuando las cosas se hacen juntos, con fuerza y convicciones se consigue el éxito, que en este caso es el éxito de la reparación y la dignidad", señaló el presidente de la Generalitat, Ximo Puig.

Puig insistió en que las victimas, sus familiares y el pueblo de Torrent "siempre fueron dignos, ya que quienes no fueron dignas fueron las instituciones". Por ello, volvió a pedir perdón a las víctimas del accidente de metro porque "un día hace ya diez años 43 personas confiaron en un servicio público de la Generalitat que, finalmente, no les garantizó aquello que debía". "Perdón por el accidente, pero sobre todo por la gestión del accidente, por la ignonimia, por el olvido, la falsedad y por intentar ocultar la historia", señaló Puig, quien coincidió en señalar junto al presidente de Les Corts, Enric Morera, que el accidente de metro del 3 de julio de 2006 fue el peor accidente de metro que ha habido en Europa.

Morera reivindicó el papel de las instituciones, que "existen para solucionar los problemas de las personas". Por ello, hizo referencia al trabajo de la comisión de investigación del accidente de metro que hace un año se constituyó en Les Corts y que "ha hecho una radiografía veraz de lo que ocurrió hace diez años que será difundida con transparencia", una vez se debata y se vote el dictamen en comisión el 5 de julio.