Evolución del concepto RSC hacia la Inversión Sostenible y Responsable (ISR)

La “sostenibilidad”, en el sentido más amplio del término, hace tiempo que no es un concepto desconocido para la sociedad en general.

El concepto de Responsabilidad Social Corporativa ya esta presente en todos los aspectos en empresas e Instituciones, y hasta las inversiones son sostenibles y responsables.

La inversión socialmente responsable es una filosofía inversora que está logrando un dinamismo donde cualquiera de nosotros podemos aportar nuestra Responsabilidad Social Individual.

Es una filosofía fundamentada en la convicción de que las estrategias, las políticas y los sistemas de RSC sólidos y coherentes constituyen un buen indicador integral de la gestión de las empresas. Dejando de ser algo solo para grandes inversores, una pyme, una micro empresa, incluso particulares pueden ser inversores.

Hay muchas formas de invertir en inversiones socialmente Responsables, y todas ellas son válidas, en Alicante hay un proyecto que cumple con estos criterios, donde se puede invertir a corto, hacer inversiones en el propio entorno, a crear riqueza económica, social y medio ambiental en el entorno mas próximo, y además tiene el atractivo del problema social que quiere resolver, como es la soledad de nuestros mayores. Avalados por la Generalitat Valenciana se trata de viviendas colaborativas senior.

La evolución más reciente demuestra que la Responsabilidad Social se considera cada vez más un criterio de evaluación para minimizar los riesgos de inversión y potenciar la rentabilidad general y ya no un enfoque de inversión contrario a la rentabilidad. Equilibrio entre lo económico, lo ambiental y lo social.

La inversión colectiva es una inversión donde muchos inversores ponen en común recursos, formando un patrimonio común que es invertido de una manera transparente y predefinida, con el objetivo de obtener un rendimiento que se distribuya entre todos los inversores en proporción a su aportación.

En 2004 la iniciativa del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, propuso un conjunto de normas en función de los “Seis principios para la inversión responsable” de las Naciones Unidas.

Desde entonces tanto la Responsabilidad Social como la Inversión Responsable han crecido exponencialmente alcanzando a personas como tu y como yo, comprometidas con la sociedad que nos rodea.

Las inversiones RSC / ASG llevan largo tiempo que ya no son un mero nicho de inversión, son un compromiso real, es evidente y comprobable en el aumento de su crecimiento, es decir, el capital que se gestiona de acuerdo con los principios RSC / ASG.

El capital que se gestiona conforme a los principios para la inversión responsable (PRI) de las Naciones Unidas asciende aproximadamente a 60 billones de dólares, la mitad de los activos institucionales que se gestionan en todo el mundo.

Los inversores institucionales siguen dominando el mercado, pero el interés de los inversores minoristas en inversión sostenible está aumentando, sobre todo a nivel local y nacional considerablemente.

En la actualidad, una calificación de RSC positiva imprime un efecto cada vez mayor en la valoración global. La perspectiva ha evolucionado: la RSC y, por consiguiente, la observancia de criterios ASG, solía considerarse un coste adicional, pero actualmente se percibe como una manera de potenciar la gestión de las empresas y la rentabilidad de la inversión.

*Maria José Molina Martínez es experta en Responsabilidad Social Corporativa.