Le juzgan por una huida peligrosa en la autovía A-31

El fiscal pide para el procesado, R.S., que tiene nacionalidad lituana, un total de ocho años de prisión como presunto autor de los delitos de conducción temeraria, atentado, conducción sin permiso y falsedad en documento oficial.

Según se indica en el escrito de acusación del ministerio público, al que ha tenido acceso Efe, los hechos tuvieron lugar el 31 de julio de 2018, cuando el procesado hizo caso omiso a un control de la Guardia Civil, ya que había robado la furgoneta que conducía en Guadalest, a la que había puesto las placas de matrícula de otro vehículo similar que robó posteriormente en Arboleas (Almería).

El procesado no se detuvo en un control que había instalado la Guardia Civil a la altura de Chinchilla de Montearagón, en el que estuvo a punto de atropellar a uno de los agentes "que tuvo que apartarse para no ser arrollado" por el fugitivo.

Tras saltarse el control, recorrió varias decenas de kilómetros por la A-31 a elevada velocidad, perseguido por coches de la Guardia Civil y realizando "maniobras bruscas", para evitar ser interceptado por los coches policiales.

En su huida, tomó las curvas por el arcén y dañó a su paso varios vehículos de particulares y uno de la Guardia Civil, al que ocasionó desperfectos por valor de más de 8.000 euros y al llegar a La Gineta puso en peligro la integridad de dos señoras de avanzada edad y dos varones que salían de un bar, según apunta el fiscal en su escrito de calificación.

Finalmente, fue detenido cerca del área de servicio 'Los Abades', en La Gineta, tras bloquearse la furgoneta en un campo de cereal e intentar correr y esconderse, apunta el fiscal, que señala que dio negativo en la prueba de alcoholemia, aunque dio positivo en drogas por THC-25.