De Hoffa a Torra pasando por Puigdemont

Me han gustado siempre las películas de mafiosos, el padrino, Hoffa, el siciliano y tantas otras. Tengo que convenir, que al ver estas pelis, no sé por qué recoveco mental, me acuerdo de Puyol y los del procés y a toda la patulea independentista fugada, en cárcel o presidiendo la autonomía. Al principio, no tenía clara mi analogía mental, pero después, me di cuenta de que el procés, es otra mafia, la mafia del 3%. Sus integrantes, son unos mafiosos en busca de impunidad y de dinero, lo que todo mafioso quiere. Diferencia, es que el mafioso habitual te convence por el miedo pero no te abduce. Estos mafiosos, también amenazan si eres enemigo y te acorralan si estás en su contra pero a la vez, han sabido contagiar en la gente de un sentimiento, falaz y artificial pero eficaz; el sentirse nación agredida. Han sabido institucionalizar el sentimiento catalán, mediante el control de la escuela, la persecución del castellano, el uso de TV3 como potente aparato de propaganda a su servicio y han  expandido su falso discurso que ha calado en parte de la población. Además han creado a un ejército eficaz y dogmático de más de 15.000 soldados entrenados con técnicas de combate del Mossad. Los famosos Mozos de Escuadra. Es el ejército al servicio de esta nueva mafia.

En Cataluña, los ciudadanos que no comulgan con la independencia, son ciudadanos de segunda y además son fachas. Los del procés, utilizan técnicas nazis o estalinistas, contra todo aquel que no piense como ellos. Los capos de la nueva mafia, son personas sin preparación, refugio de la peor calaña y amoralidad. Han conseguido convencer a una sociedad que no lee y que vive contaminada por el veneno de la televisión.

Mientras tanto, qué han hecho los diferentes gobiernos de España. Nada, se han embadurnado de indulgencia, se han conjurado también con los mafiosos llenos de complicidad interesada; yo te dejo hacer si tu me votas y viceversa. El anterior gobierno, solo la puntita del 155 no fuera que les llamaran fachas y, sobre todo, el actual, hacen el remedo de que se enfrentan a los del procés, son legalistas, se oponen en apariencia, porque en realidad están de su parte. Todo les parece bien, han sucumbido al chantaje de la mafia. Especialmente este Pedro Sánchez, el Dr. Trampas, que no está donde tiene que estar. Mantiene viva su campaña publicitaria pública, el Kennedy hispano, con sus  posturitas y sonrisas, mallas de running acompañado de perritos falderos,  aviones oficiales para conciertos con la esposa y helicópteros para  bodas de cuñados y todo eso por la seguridad del presidente. Ahora de viaje oficial durante una semana para una cita en Naciones Unidas al final de la misma . Aunque las malas lenguas, me han dicho que necesita una semana para tener la paz precisa y poder leerse por primera vez el tocho de su tesis doctoral y así defenderla con eficacia en el Senado.

Y para terminar, está el tema de los símbolos, no son baladíes. Son importantísimos. Por eso reaccionan tan mal los independentistas cuando se los quitan. La libertad de ponerlos es mayor que la de retirarlos. La simbología son formas de marcar, señalar a grupos de población como animales; los del lazo y los sin lazo, los otros, los traidores españoles. Esto lo hicieron con eficacia contumaz los nazis.

* Rafael Simón Gallardo es médico y cuenta cuentos inveterado...