Las medusas también se van de vacaciones

El descenso de atenciones sanitarias por picaduras de medusas ha sido muy notable este verano en las playas de la provincia de Alicante. Así lo revela el informe elaborado por Cruz Roja sobre su actividad en las playas alicantinas durante la temporada estival. Las asistencias sanitarias en este punto han bajado un 60%, pasando de atender a 17.500 personas en el verano de 2016 a menos de 7.000 en 2017.

Durante esta temporada, Cruz Roja Española ha estado presente en 18 playas del litoral alicantino con un despliegue de 60 profesionales diarios que han velado por la seguridad y la salud de bañistas y visitantes. EN total han realizado 7.000 intervenciones, la mayor parte de ellas relacionadas con heridas y traumatismos leves, exposición excesiva al sol y patologías previas de las personas usuarias que manifestaron síntomas durante su estancia en la playa, entre otras.

En cuanto a los perfiles de las personas atendidas, existen varios tipos. Por un lado, mayores de 65 años; niños y niñas debido a heridas, contusiones leves, golpes de calor o extravios en los arenales; personas con patologías previas o enfermedades crónicas que se ven incrementadas por factores como el efecto de las altas temperaturas o la deshidratación; y jóvenes que en algunos casos adoptan conductas inseguras o imprudentes, por omisión o desconocimiento, como el acceso por zonas no permitidas o peligrosas, por bañarse bajo el efecto del consumo de sustancias, así como a causa de las zambullidas o por alejarse demasiado de la costa.

En la provincia de Alicante especialmente destaca la asistencia a personas extranjeras que desconocen el idioma y las condiciones de la playa, lo que ocasiona un aumento importante en el número de rescates. Por todo ello, Cruz Roja ha realizado este verano una campaña de sensibilizcion a través de las redes sociales y a través de carteles y folletos para dar consejos a la población con los que prevenir accidentes y ahogamientos en verano en varias idiomas para acercar los mensajes de prevención a la población extranjera.

Además de los rescates y las asistencias sanitarias, Cruz Roja ha efectuado una labor importante de ayuda a personas con movilidad reducida o discapacidad para disfrutar del baño en condiciones de seguridad a través de dispositivos adaptados. En total, 1.558 personas han podido disfriutar de un baño en condiciones de seguridad.

Respecto a menores, el descuido de los padres o familiares ha llevado a Cruz Roja a localizar durante el verano a 68 menores extraviados en las citadas playas de la provincia.