La invisibilidad digital amenaza a los cerrajeros de Alicante

Los cerrajeros, especialmente aquellos que trabajan como autónomos, se enfrentan a una crisis sin precedentes. Desde que Google eliminó la posibilidad de que estos profesionales pagasen por anuncios en su buscador, su visibilidad online se ha desplomado, afectando directamente a su situación laboral.

Según explica Juan Carlos Saiz, cerrajero urgente en Benidorm, esta decisión ha reducido sus encargos hasta en un 85 %. Lo que antes eran servicios diarios, ahora apenas suman uno o dos encargos por semana.

El impacto de la falta de publicidad geolocalizada

La decisión de Google de retirar la publicidad del sector a nivel global pretendía combatir las prácticas abusivas y el fraude de ciertas empresas que operaban bajo múltiples nombres para inflar precios. Aunque esta medida protege a los usuarios, también afecta a los profesionales legítimos que usaban la plataforma de forma responsable.

Los cerrajeros dependen de la confianza y cercanía con sus vecinos y, en los últimos años, Google se había convertido en la herramienta perfecta para conectar con sus clientes. Gracias a la posibilidad de segmentar la publicidad por zonas concretas, los autónomos podían llegar de manera directa a su comunidad sin depender de terceros.

Para ellos, que ya habían eliminado estrategias tradicionales como las pegatinas para evitar problemas de intrusismo y estafas, esta decisión supone un duro golpe que les obliga a invertir en las plataformas de selección de profesionales y directorios de empresas a la antigua usanza.

SEO: una solución insuficiente para los cerrajeros

Ante esta nueva realidad, Google deja una puerta abierta: los cerrajeros aún pueden aparecer en los resultados orgánicos (no pagados) del buscador. Esto supone una ventaja para las empresas que habían recurrido al SEO (estrategias de posicionamiento) como alternativa para aparecer en los primeros puestos de las búsquedas.

Sin embargo, el SEO no ofrece garantías. Aunque es una herramienta útil, sigue siendo manipulable y cara. Las grandes empresas y directorios de profesionales, con mayores recursos, pueden posicionarse gracias a complejas estrategias de marketing digital. Sin embargo, los pequeños negocios lo tienen difícil para competir en igualdad de condiciones si no pagan por un servicio de publicidad en una de estas plataformas.

La decisión de Google discrimina a los autónomos

El resultado ha sido que el propósito inicial de Google de beneficiar a sus usuarios, sin hacer una criba exhaustiva de sus anunciantes, ha llevado a que paguen justos por pecadores. Lo más llamativo es que esto ocurra en la era de la digitalización, mientras se exige a las profesiones tradicionales pasarse sin demora a modelos de negocio online.

Dando visibilidad a este problema y buscando el respaldo de sus comunidades, los profesionales autónomos tratan de mantener sus negocios a flote y lograr que Google vuelva a considerarles dignos de estar en la primera página de resultados para seguir ofreciendo sus servicios sin intermediarios.

Profesionales como Juan Carlos, que intenta darse a conocer como cerrajero urgente en Benidorm, vuelven a depender del boca a boca y de la buena reputación dentro de su comunidad para poder seguir trabajando al margen de los caprichos de internet.