Los bomberos reclaman cambios en la organización y gestión de las emergencias

Según un comunicado de los sindicatos, los bomberos "fueron excluidos de las conversaciones" con la Generalitat para la elaboración de la Ley de los servicios de emergencias de la Comunitat Valenciana (7/2011) "por una interpretación injusta de la legislación que sólo permitía al Ejecutivo negociar con los sindicatos mayoritarios de la Administración". 
 

De este modo, según los bomberos, la negociación tuvo lugar "con representantes de conserjes, administrativos, auxiliares y todo tipo de trabajadores públicos que no se integran en los Servicios" de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS).
 

La Ley 7/201, que regula al colectivo de SPEIS, señala que en la Comunitat Valenciana, existen seis servicios SPEIS, tres de ellos de ámbito municipal, en Castellón, Valencia y Alicante, y otros tres de ámbito provincial constituidos bajo la fórmula del Consorcio y dependientes de las tres diputaciones provinciales. 
 

Esta ley nace, según apuntan las fuentes, sin la voluntad política de dirigirse hacia "un cuerpo único de bomberos de la Generalitat como único medio válido para homogeneizar plantillas, condiciones laborales, sistemas de trabajo y protocolos de actuación, optimización de recursos materiales y humanos y hacer una inversión racional del presupuesto dedicado al Sistema Público de Emergencias". 
 

Además, esta legislación "ratifica la situación existente, con dispersión de competencias entre las distintas administraciones públicas, entre empresas públicas y privadas, con distintos tipos de contratación de los bomberos forestales y creciente precariedad laboral", según el comunicado. 
 

A juicio de los sindicatos, la coordinación es "una palabra bonita para los medios pero imposible de llevar a la práctica", ya que "la ambigüedad y la falta de concreción en la ley sobre qué modelo de servicio público de emergencias se persigue deja la gestión en manos de la improvisación". 
 

Asimismo, critican la gestión de los grupos políticos gobernantes, porque, "cada vez que hay un gran incendio", se producen situaciones de "descoordinación, falta de protocolos unificados de trabajo y disparidad de medios humanos y materiales según de qué zona geográfica se trate". 
 

"Nos parece increíble que no haya ni el más mínimo autoexamen de los cambios necesarios y que todo sean halagos y adulaciones. No se pone en duda el esfuerzo que han hecho los trabajadores en el incendio de Llutxent, sino el sistema y la organización de la cual son responsables directos los políticos y el director técnico", han aseverado los sindicatos. 
 

Según los representantes de los bomberos, tienen prevista una reunión con el nuevo presidente de la Diputación de València y "también con el president de la Generalitat", Ximo Puig, con el objetivo de "que se pongan en marcha las mejoras correctivas en la gestión de las emergencias".