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JOAQUÍN NÚÑEZ Viernes, 03 de Marzo de 2017

INTERVENCIÓN DEL SPEIS

¿Cómo pudo sujetarse la niña de Luceros rescatada por los bomberos de Alicante?

La niña que fue rescatada del edificio de la Plaza de los Luceros por los bomberos pudo apoyar sus píes en un pequeño saliente de apenas unos centímetros. Un espacio en el que una persona joven o mayor no hubiera podido sujetarse.

Este es el edificio de la Plaza de los Luceros de Alicante en el que los bomberos rescataron el miércoles a una niña de 5 años. La menor se sujetó a la ventana del séptimo piso (sexto más una entreplanta) y apoyó sus píes en un pequeño saliente de apenas unos centímetros. Gracias a ese mínimo apoyo la niña pudo aguantar sin precipitarse a la calle hasta la llegada de los bomberos, que a través de un vehículo escalera la pudo rescatar.

 

 

 

Cuando los bomberos llegaron a la Plaza de los Luceros se encontraron con una escena de nerviosismo y angustia. En la acera, debajo de la ventana de la que colgaba una niña, varias personas estaban sujetando una sabana para intentar evitar el golpe si la menor caía. Además, una vecina del mismo inmueble, presa del nerviosismo, había lanzado a la calle un colchón. Los bomberos iniciaron entonces el procedimiento para estos casos.

 

Lo primero que hicieron fue extender en la calle, debajo de la niña, un colchón lleno de aire por si la menor caía finalmente. Es un colchón especial con varias aberturas en los laterales que sirven para expulsar el aire y absorber el impacto de la caída y que no se produzca un efecto rebote. Los bomberos recomiendan que en este tipo de casos hay que intentar caer en el centro del colchón, adoptando una postura encogida y caer "de culo", según explica el sargento del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios (SPEIS) de Alicante, Adrián García.

 

De forma paralela a la instalación del colchón, un equipo de bomberos subió a la vivienda de la niña para entrar en la casa, pero había una puerta de seguridad con doble blindaje. No fue necesario tirarla abajo puesto que la escalera con dos bomberos ya subía al rescate de la niña. En apenas 20 o 30 segundos la escalera había llegado a la altura de la menor, que fue sujetada por uno de los bomberos, que fue quien la metió en la cesta, salvando así su vida. Tambien se había preparado un equipo de bomberos para descolgarse por la fachada desde arriba y acceder así a la menor. No fue necesario.

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