Las buenas sensaciones del Benidorm

De momento, son sólo eso, buenas sensaciones. Los expertos de este deporte insisten en que esto no ha hecho más que empezar. Y es verdad. Tan sólo llevamos tres jornadas de Liga Asobal. Pero suficientes para comprobar si la maquinaria está o no lo suficientemente engrasada. Y en el Balonmano Benidorm lo está. Muchos son los argumentos para explicar este gran arranque. Para empezar, en los despachos se ha trabajado a destajo durante este verano.

La apuesta de Javier Abinzano no ha sido nada desdeñable. Su objetivo ha sido claro desde el principio: alicantinización a base de buenos y experimentados jugadores sin romper la base del año pasado. Y lo ha conseguido. La plantilla del club blanquiazul no tiene nada que envidiar a la de muchos equipos punteros de la categoría. La mezcla no sólo es buena, sino que ha elevado la calidad del grupo. Mantener a Fernando Latorre ha sido también otro de los aciertos. El míster alicantino es un “viejo rockero” de la Asobal y eso en una liga tan competida e igualada es un punto a favor. Hombre de mando, con carácter y con una cabeza privilegiada para esto del balonmano. Algunos le bautizan con “el Pep Guardiola del balonmano alicantino”. Imaginamos que no sólo lo hacen por su parecido físico con el técnico catalán, sino también por su capacidad de gestión y conocimientos tácticos.

Ya lo dijo Javier Abinzano este verano, “Fer y yo nos parecemos mucho. Él tiene la misma concepción del balonmano que yo”. La unión directiva-entrenador es un hecho. Y esa simbiosis se multiplica cuando salta a la pista. La implicación de los jugadores en el proyecto ha sido ejemplar desde el minuto uno. Y eso también se ha reflejado en estos primeros partidos. No es extraño que Diego Moyano sea uno de los porteros más destacados de este inicio de temporada, ni tampoco sorprende que David Cuartero sea el máximo goleador del torneo hasta la fecha. El trabajo da frutos si se es constante. Y aquí la constancia es un valor en alza. Con los pies en el suelo, pero soñando despiertos. Esa es la realidad ahora mismo en la familia benidormense. El objetivo es la permanencia, pero lo cierto es que la dinámica está siendo ascendente y muchos miran de cerca los puestos nobles de la tabla.

Está claro que todo lo que se pueda adelantar ahora será un respiro más adelante, cuando las cosas tiendan a torcerse. Y ese ha de ser el camino a seguir. Paso a paso, partido a partido, sin salirse de la trazada y sumando puntos sin hacer mucho ruido cual hormiga en el cuento de la cigarra. Porque el trabajo de hoy es la música y el baile del mañana.  

*Alejandro Javaloy es publicista y periodista y actualmente trabaja como Social Media Manager en PuntoFuerte Balonmano.